Durante el anuncio deL Tercer Barómetro CIO de CSC, tuvo lugar una mesa redonda que contó con la presencia de diversos directivos responsables de tecnología en sus organizaciones. Junto a ellos destacó la presencia de Carles Flamerich, director general de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información de la conselleria de Empresa y Ocupación de la Generalitat de Catalunya. Según su visión, “hemos de cambiar todos, no sólo la Administración”, en referencia al uso de las tecnologías, “que están aquí para utilizarlas y para conseguir más productividad, incremento económico y para que los ciudadanos vivan mejor”.
Víctor Cuatrecasas, director general de CSC España, por su parte afirmaba que observa “un cambio radical en la demanda ya que desde hace unos años ya no se nos piden herramientas, ahora el enfoque es más de negocio”.
En representación de la Fundació CTecno, su presidente Ginés Alarcón exploraba en el ámbito de la innovación: “fundamentalmente hay que innovar en la manera de hacer las cosas porque la innovación la está proporcionando la tecnología”. Sin embargo, indicaba que los grandes retos para los CIO son “los mismos que los de años atrás: la gestión de la cartera de pedidos, la reducción de los costes, la optimización”.
Albert Delgado, director general de Penteo, coincidía con el Barómetro presentado por CSC. “Las prioridades son cada vez menos tecnológicas, el CIO tiene bien provisionada la tecnología, el reto es que entiendan el negocio y reduzcan los costes operacionales de la compañía”, remarcaba Delgado. Desde la óptica de Luis Miguel Nuez, Chief Technology Officer de Zurich Financial, se observa que hay una gran exigencia del negocio con respecto de TI. Argumentaba que “la inversión se ha contenido porque el negocio es mucho más escéptico sobre el retorno de dicha inversión, por ello debe estar alineada al negocio”. Y comentó que la tecnología no es el fin último, sino el medio, “y todo lo que sea virtualización y cloud facilita no tener que comprometerme con unos costes a largo plazo”. De acuerdo con lo comentado anteriormente se mostró Nicolás Cosqueric, Global Information Services en Sara Lee España. Sin embargo, sacaba a relucir la importancia que tiene la gestión de la gente en los departamentos informáticos, “que es una tarea clave”. Los nuevos cambios se dejan también notar en Kern Pharma, “donde hace unos años el departamento de Informática sólo suministraba PCs”, como declaraba Albert Almajano, director de Sistemas de Información de esta compañía. “Ahora vamos a la gestión del día a día y eso es una oportunidad porque los Sistemas de Información permiten optimizar recursos; otro cambio importante es que hasta la fecha los cambios los pedía la empresa y ahora también los piden los usuarios”. De vueltas a la innovación, el director de Organización y Sistemas de Información de FinConsum, Juan Manuel Tabero, la relacionaba con la eficiencia y el valor: “toda vez que la innovación hay que ponerla en valor”, indicaba.
Outsourcing
Carles Flamerich quería dejar constancia de que un Gobierno debe ser práctico, en referencia a la idoneidad o no de acometer proyectos de externalización. “La principal función de un Gobierno es gobernar y gestionar los bienes públicos, no hacer informática, vamos a contar con las empresas privadas para realizar las funciones de informática y telecomunicaciones; las máquinas y software no tienen que estar en el Gobierno sino fuera”. Ginés Alarcón mencionó el auge del 3% que tiene el outsourcing, según el estudio de CSC. “Eso indica una tendencia a la que vamos todos y uno de los cambios de los modelos de gestión afecta al outsourcing; aunque mi opinión es que en este área tenemos mucho que avanzar para que la externalización dé sus frutos”. Víctor Cuatrecasas respondía que nota “una gran tendencia hacia la externalizacióny hacia cloud, hacia otro concepto de inversión y de pago por uso”. En torno a estos dos aspectos aclaraba que CSC España ha crecido un 19% con un alto porcentaje en outsourcing. Carles Flamerich apuntó en este sentido que el éxito de un proyecto “es escuchar, porque grandes proyectos fracasan porque no se ha escuchado, no tiene nada que ver con la tecnología”.
Albert Delgado tenía la apreciación de “los proveedores de outsourcing están sufriendo mucho, los presupuestos de TI están siendo planos y el outsourcing está creciendo el 2,8%, que es muy poco, no es nada para un mercado que se supone que tiene que absorber mayor crecimiento”.
Sara Lee se encuentra en “un modelo de outsourcing extremo”, con un 80% del presupuesto externalizado con varios proveedores globales. Nicolás Cosqueric así lo aclaraba y puntualizaba que “lo que no se puede hacer es externalizar un problema, porque tendrás más problemas”. Juan Manuel Tabero desde FinConsum aportaba otra perspectiva: “el paso más difícil es el contrato, llegar a finalizarlo, donde las partes se previenen la una a la otra de forma defensiva; sin embargo, un outsourcing es un proyecto para hacer en colaboración, y si algo hay que hacer para evolucionar es desarrollar un modelo para estar alineados”.
Zurich es una entidad con un alto grado de externalización (alrededor del 70%). Según Luis Miguel Nuez, la empresa tiene un debate interno importante para ver el grado de involucración y de government, pero afirmaba tener claro que “si un outsourcing fracasa no es porque el proveedor lo haga mal, sino porque ninguna de las dos partes lo hace bien”. Un apunte en esta línea lo aportaba Albert Almajano. Para el responsable de Sistemas de Kern Pharma, “para que triunfen estos contratos deben ser a largo plazo y la externalización debe basarse en aportar al cliente lo que no conoce, el proveedor tiene que tener ese ‘expertise’ y dar valor”.