María José García, Directora de Tecnologías de la Información de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), habla sobre la digitalización acelerada que experimentado la Educación en los últimos tiempos, y la UAM en particular.¿Cómo ha influido la pandemia en la digitalización del entorno educativo?
La influencia ha sido enorme. La necesidad de continuar el curso 2020 de la mejor manera posible aceleró el despliegue de soluciones alternativas a las clases presenciales. Aún hoy, tanto las instituciones educativas como las empresas proveedoras continúan colaborando para hacer viable un proyecto de educación mixta, tanto presencial como virtual.
¿Y en el caso concreto de la Universidad Autónoma de Madrid?
M. J. G.: Hasta el inicio de la pandemia no habíamos planteado las clases en modo online, ni tan siquiera la docencia híbrida. Tuvimos que lanzarnos a ello directamente a en la fase de producción, sin pruebas previas.
¿Qué tecnologías o tendencias están sobresaliendo en su universidad como respuesta a la educación online?
M. J. G.: El curso 2020-21 se estructuró desde el principio sobre el modelo de docencia híbrida, desplegando gran parte de laboratorios en un modelo virtual.
¿Cuáles son ahora sus prioridades?
M. J. G.: El personal docente ya contaba con medios para el trabajo flexible y las herramientas colaborativas, por eso, en este último año nos estamos centrando en dotar de medios similares al personal administrativo.
¿Mantienen inversiones y presupuestos específicos para los procesos de transformación digital?
M. J. G.: Si, y esperamos contar con dotaciones externas, como los fondos europeos NextGeneration.
¿Cuál está siendo el impacto de las nuevas tecnologías en el día a día de los empleados y alumnos?
M. J. G.: La comunidad universitaria se va adaptando poco a poco a las formas de trabajo remoto en todos los aspectos, desde los procesos administrativos a la resolución de incidencias informáticas en su entorno de trabajo. En ese sentido, resulta fundamental proveer de información clara y concreta a las personas que precisan asistencia.
¿Ha jugado el sector educativo un papel innovador en los últimos tiempos?
M. J. G.: Yo considero que sí. Ciertamente, este sector alcanza a gran parte de la sociedad, ya sea porque son miembros directos de la comunidad educativa o por ser actores muy cercanos, como son las familias. Todos ellos han vivido de primera mano los cambios que se han producido a lo largo de este último año.
¿Cuál es el principal reto de la UAM dentro de su proceso de digitalización?
M. J. G.: El reto principal es conseguir una convivencia armónica entre el mundo analógico y el digital, de modo que la tecnología potencie la docencia presencial.