El año 2022 ha sido un año apasionante para Kyocera. Durante los últimos doce meses hemos abordado la aceleración y evolución de nuestra estrategia, diversificándola para convertirnos en un partner global de soluciones y servicios que nos permiten acompañar a las organizaciones en su transición a un modelo digital de forma ordenada y alineada con sus objetivos de negocio.
Nuestros más de 80 años de trayectoria han seguido un camino en constante evolución siguiendo nuestro principio ‘client-first’, lo que nos ha permitido adquirir un profundo conocimiento y experiencia de los procesos empresariales de nuestros clientes.
Esta evolución se asienta en el liderazgo de Kyocera en el core business de nuestro negocio de Office Printing, que siempre ha estado relacionado con soluciones y dispositivos de impresión de reconocida calidad y fiabilidad en entornos de oficina. Pero en los últimos años nuestro modelo de negocio ha evolucionado a pasos agigantados en torno al empleado y la gestión del documento digital, contribuyendo a la creación de los nuevos ecosistemas Smart Work más eficientes, productivos, seguros y sostenibles.
Esto ha exigido una estrategia evolutiva en nuestra propia organización. De hecho, en Kyocera llevamos años ofreciendo automatización de procesos y servicios ECM, una transición natural desde el momento en el que la impresión pasa a ser concebida como algo integrado en los procesos internos de una organización. Esta complementariedad es la que nos ha dado cada vez más capacidad para implantar en las compañías soluciones de negocio para su digitalización y su gestión de infraestructura.
Además, llevamos años siendo parte relevante del ecosistema IT de las empresas a través de los servicios gestionados que prestamos. Gracias a ese entendimiento que tenemos de organizaciones públicas y privadas, era el momento de crear una unidad de negocio independiente al printing que ampliase el alcance de los servicios que prestamos. El resultado de esta evolución ha sido la consolidación de una sólida propuesta en el área de Business Solutions, una nueva unidad desde la que ofrecemos soluciones y servicios alineada con las necesidades de las empresas en ICT y ECM.
Por último, con la unidad de negocio de Production Printing, Kyocera España ha diversificado su portfolio entrando de lleno en la industria de la impresión profesional.
2023, nuevas perspectivas
Por todo ello, somos optimistas de cara a 2023, un año en el que todas las organizaciones tendremos que afrontar retos globales derivados de la confluencia de factores como la guerra en Ucrania, la inflación, la amenaza de recesión o las continuas interrupciones de la cadena de suministro.
En este escenario, la tecnología tendrá un papel clave para que las empresas puedan paliar los efectos de la crisis. En estos momentos, todas las compañías tienen como prioridades aumentar la productividad, asegurar la continuidad de negocio, y conseguir la máxima agilidad y flexibilidad para tomar decisiones en función de los cambios que se producen en el mercado. Esa capacidad de adaptación solo se podrá conseguir si disponen de una infraestructura digital que esté al servicio de sus estrategias corporativas.
Desde el punto de vista de Kyocera, el impulso de la transición a modelos digitales, generadores de más valor, no solo va a ser decisivo para mantener la competitividad en un 2023, de por sí complicado, sino también para sentar las bases de la innovación y el posicionamiento futuro de las organizaciones.
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