Constituido en Barcelona el 22 de mayo de 1978, el Banco de la Pequeña y Mediana Empresa (Bankpime) celebra este año su 30 aniversario, que coincide con un momento clave para la entidad tras la entrada el pasado año en su capital, con una participación de 27,5 por ciento, de la entidad financiera portuguesa Banco Internacional do Funchal (Banif), que se convierte así en su accionista de referencia, junto a Agrupación Mutua, que conserva un 25 por ciento.
Con ese impulso, Bankpime afronta ahora su Proyecto Bankpime 2008-2011, con el que persigue duplicar su cifra de negocio y triplicar su beneficio en un plazo de cuatro años. En la consecución de ese ambicioso objetivo, las TIC juegan un papel protagonista y, de hecho, han sido una de las palancas claves del éxito del proyecto de saneamiento que Bankpime emprendió en 2003. En ese momento y como explica el responsable del Departamento de Sistemas de Información de Bankpime, Jordi Simón, “la situación tecnológica de Bankpime, aunque no era dramática, puesto que en su momento había sido una entidad muy avanzada, sí que exigía una modernización dado que, durante los años de pérdidas, no se habían acometido grandes proyectos”.
Ciertamente, los sistemas de Bankpime en 2003 eran funcionales y, de hecho, el banco prestaba servicios correctamente con unos altos índices de seguridad, pero su arquitectura de sistemas no estaba preparada para crecer. “Existía un servidor para cada servicio, no contábamos con un Centro de Contingencia on line y eso se traducía en un retardo excesivo para el negocio; la arquitectura de seguridad y comunicaciones era poco escalable, y la tecnología de la red de oficinas, si bien era funcional, no estaba preparada para el futuro”, enumera Simón.
La situación exigía una respuesta inmediata y, con ese objetivo, “se revisaron todos y cada uno de los puntos críticos y se determinaron las acciones a llevar a cabo para su mejora siempre a un coste reducido, lo que implicó renegociar proveedores y sistemas de contratación”.
En base a ese estudio, se definió un Plan Director a cuatro años, que contemplaba cuatro grandes proyectos: la modernización de la red WAN de oficinas, la evolución del entorno de seguridad perimetral, la renovación y optimización de hardware, y el establecimiento de un Centro de Contingencia a la altura de los requerimientos del negocio.
En el primer ámbito, Bankpime optó por saltar de Telefónica a BT con la consecuente migración de su red de datos. El proyecto se inició en noviembre de 2003 y en abril de 2004 la nueva red entraba en funcionamiento. De hecho, el principal motivo de la apuesta de Bankpime por BT radicó en que “entendieron muy bien lo que necesitábamos y tecnológicamente se adaptaron muy rápido a nuestras necesidades”, de acuerdo con Simón.
En base a esa nueva arquitectura de red, las 23 oficinas de Bankpime están conectadas actualmente con sus Servicios Centrales, en Barcelona, con una línea punto a punto FrameRelay y otra línea ADSL que actúa como backup activo en base a una filosofía de priorización de tráfico. El técnico indica que “en condiciones normales, cuando las dos líneas funcionan correctamente, las aplicaciones más críticas van por la línea punto a punto y el tráfico menos prioritario se desvía a la ADSL; y, en caso de caída de alguna de las dos líneas, todo el tráfico pasaría por la red que quedase activa”.
Aunque, a día de hoy, esta red funciona correctamente, en línea con el Proyecto Bankpime 2008-2011 se ha definido, también con BT, una nueva generación de red basada en tecnología MPLS que permitirá a la entidad proporcionar calidad de servicio, “no sólo a la voz, donde por el momento no vamos a entrar, sino fundamentalmente a las aplicaciones críticas”, precisa Simón, para añadir que “también se facilitarán servicios de videoconferencia a las oficinas”.
Con la nueva red, la estructura de conexión de la era de oficinas sería muy parecida a la actual, dos líneas -una punto a punto, y una ADSL-, pero no activo-activo, sino activo-pasivo, posibilitando la priorización del tráfico.
Además, conseguiría un incremento notable de la capacidad, pasando de los 256 Kbps actuales a 2 Gbps en los puntos clave, como sus tres cabeceras de zona en Madrid, Valencia y Zaragoza; y el resto a 1 Gbps. El proyecto todavía está pendiente de aprobación, pero se prevé que “si no acabado, estará bastante avanzado antes de que termine el primer semestre”.
Con posterioridad a la renovación de la red WAN de oficinas, Bankpime también emprendió la modernización de su red corporativa en Servicios Centrales. El proyecto, que finalizó el pasado año, ha supuesto la renovación integral de toda la electrónica del core de la central, si bien en esta ocasión la entidad financiera ha continuado con el mismo proveedor: Cisco. Concretamente, se han renovado los equipos de cada una de las nueve plantas del edificio con switches de 24 puertos y se han instalado dos nodos de core switching -Cisco Catalyst 3750- en los CPDs de la sexta y segunda planta, con enlaces de fibra. Simón destaca que “hemos pasado de FastEthernet a Gigabit Ethernet, tanto para los servidores como para los PCs, y hemos optimizado el hardware de forma que, en lugar de tener una red con un elemento hardware en cada uno de los segmentos, ahora disponemos de VLANs”.
En el apartado de seguridad perimetral, Bankpime se encontraba en 2003 con un sistema firewall basado en CheckPoint con Solaris, que estaba discontinuado. No obstante, “el sistema funcionaba correctamente, pero queríamos más funcionalidad y la plataforma existente no nos permitía avanzar”.
Tras estudiar distintas posibilidades, Bankpime se decantó por la tecnología de StoneSoft, con el punto de mira puesto ya en el nuevo Centro de Contingencia. “Todo lo que le falta a Check Point, lo tiene StoneGate y, además, buscábamos una solución que nos permitiera realizar una gestión centralizada del firewall”, indica Simón.
La solución StoneGate, que entró en producción en enero de 2005, se levantó sobre un cluster activo-activo HP ProLiant en la Central, estableciéndose un segundo nodo, también sobre hardware de HP, en el Centro de Contingencia, un proyecto que echó a andar en septiembre de 2005 y entró en operatividad en junio de 2006, realizándose la primera prueba en real en octubre de ese mismo año. En esa vertiente, Bankpime también ha trabajado de la mano de BT, en este caso, en asociación con HP.
Réplica on line
El nuevo Centro de Contingencia de Bankpime se ubica, bajo la fórmula de hosting, en las instalaciones de Cable&Wireless que en su momento adquirió BT. Bankpime dispone en el centro tanto de una zona de servidores, como de un espacio habilitado con puestos de trabajo al que, en caso de desastre, podrían trasladarse los trabajadores de la entidad, que actualmente suma cerca de 300 empleado, 120 en Servicios Centrales. “Ante un potencial desastre, en sólo cuatro horas y de forma totalmente transparente para las oficinas, retornaríamos a la continuidad del servicio y siempre con los datos actualizados justo en el momento previo al corte”.
Este proyecto exigió, lógicamente, una consolidación previa del entorno servidor de la entidad que, en ese momento, sumaba alrededor de 50 máquinas en las que, para complicar la situación, corrían distintos sistemas operativos: Windows NT, Windows 2000, sin olvidar True64, el SO del host Alpha Server de HP que soporta el core del negocio de Bankpime. Se trata de su terminal financiero, una solución desarrollada con Infodesa, de cuyo mantenimiento es responsable Indra y que actualmente está evolucionándose para saltar de una arquitectura cliente/servidor a un entorno 100 por cien web. El terminal financiero ataca Oracle como BBDD, al igual que el resto de aplicaciones corporativas que soportan la operativa de Bankpime.
Para su avance en e-banca, Bankpyme ha apostado por un entorno levantado sobre Windows 2003 Server, con Microsoft Internet Information Server (IIS) como servidor web y JBoss como servidor de aplicaciones.
En ese escenario y a la búsqueda de las máximas garantías de continuidad del servicio, se emprendió una consolidación que condujo a la reducción de esas 50 máquinas a un total de 15, en su práctica totalidad equipos HP ProLiant de distintos modelos. Bankpime no tuvo la necesidad de adquirir nuevo hardware ya que “disponíamos de máquinas muy potentes de reciente adquisición a las que fuimos trasladando los diferentes servicios”, indica Simón.
Se aprovechó además el proceso de consolidación para unificar los sistemas operativos, con Windows Server 2003 en el entorno servidor y Windows XP en el ámbito cliente, que suma un total aproximado de 400 equipos, también de HP.
Una vez racionalizado el entorno servidor, Bankpime atacó el ‘storage’, consolidando los distintos sistemas de almacenamiento existentes –en su mayoría DAS- en una cabina Eva de HP en Servicios Centrales y, en paralelo, se instaló una segunda Eva en el Centro de Contingencia posibilitando una réplica on line de los datos entre ambas unidades.
Mirando al futuro
Con todas estas iniciativas de modernización y, tal y como subraya Simón, “hemos preparado para el crecimiento el conjunto de nuestra infraestructura TIC a todos los niveles –comunicaciones, seguridad y sistemas de información- y ahora contamos con una infraestructura que nos permite crear nuevas servicios plenamente orientados al negocio, manteniendo asimismo el control de los costes”.
Sobre estas bases, Bankpime afronta ahora una nueva fase de relanzamiento que, nuevamente, camina mano a mano con la tecnología. “El objetivo es aprovechar los actuales recursos tecnológicos y hacerlos evolucionar para
mejorar el servicio y reducir los costes”, señala Simón.
En ese contexto, a día de hoy, existen dos grandes vías abiertas: la mencionada evolución de la red de las oficinas; y la centralización, optimización y renovación del sistema de backup.
En este campo, Bankpime viene utilizando Legato Networker de EMC para el host y la solución BrightStor de CA para el resto de entornos. Simón explica que “Con estos sistemas, cada servidor copia sus datos y no hay más inteligencia, pero nosotros queremos ir más allá y contemplamos dos posibilidades, o bien centralizar el backup en la EVA utilizando BrightStor u otro producto; o bien avanzar por el camino de la virtualización del almacenamiento”.
