La Comisión Europea ha adoptado definitivamente el estándar DVB-H para la televisión a través del móvil, instando a los países integrantes de la UE a la promoción del mismo. Esta tecnología (cuyas sigas se corresponden con Digital Video Broadcasting for Handhelds) es una de las más soportada por los principales fabricantes y operadoras del continente (Nokia, Motorola, Samsung, Sony, Vodafone u O2).
La CE ha tomado esta decisión con el objetivo de dar al traste con una posible guerra de formatos que lo único que haría es retrasar la adopción de un estándar y el desarrollo de la tecnología necesaria para llevarlo a cabo. Sin embargo, la decisión de la CE tiene una limitación: cada país es libre de tomar las decisiones que crea conveniente para favorecer este formato. Además, los socios de la UE pueden dejar que este estándar coexista con otros, sin estar obligados a eliminar estos últimos.
A pesar de que la TV móvil aún se encuentra en pañales, en países como Italia ya está operativa y se prevé realizar lanzamientos en otros estados como Finlandia, Austria, Francia, Suiza y España. Además, los principales operadores están satisfechos con esta decisión, ya que se espera que en 2009 exista una gran demanda de este servicio, que para 2011 podría mover una cifra de negocio cercana a los 20.000 millones de euros.
