Un estudio dado a conocer por la consultora Krauthammer descubre ciertas carencias graves en las políticas de gestión de una compañía, a la vez que denuncia fuertes diferencias entre la conducta que los empleados esperan encontrar en los directivos y su comportamiento real.
En este sentido, los empleados esperan que sus jefes les den la posibilidad de analizar sus problemas laborales con ellos, que admitan sus errores de forma natural o que busquen las opiniones de su capital humano en lo referente a su propia actuación. Sin embargo, parece que la platilla sólo está satisfecha con lo que obtiene aproximadamente la mitad de las veces, como se observa en el gráfico.
Asimismo, se demanda un contacto más cercano y personal en lugar de una dependencia excesiva del correo electrónico y el teléfono.