usedSoft ha abierto este verano en España una oficina de ventas, y de acuerdo con Peter Schneider, gerente de usedSoft,“las empresas españolas cada vez se están familiarizando más con la idea de ahorrar comprando software de segunda mano.” No en vano, promulga esta compañía que el software no se desgasta. “Una licencia usada tiene para el comprador el mismo valor que una nueva – con la diferencia de que el comprador se la compra a usedSoft a un precio mucho más económico. El ahorro que esta empresa permite a sus clientes oscila entre el 20 y el 50 por ciento, dependiendo de la actualidad del software”, señala.
Las licencias de usedSoft incluyen versiones que actualmente están en el mercado y ediciones antiguas que el fabricante ya no distribuye, cuyas licencias adquiere a través de insolvencias, ceses de negocio, reestructuraciones, cambios del sistema informático… Y la garantía jurídica está asegurada en el principio de agotamiento vigente en la Unión Europea. Según usedSoft, el derecho de difusión del fabricante de software se agota desde el momento en que éste pone en venta el producto por primera vez y que el primer adquisidor lo compra.
“Con la primera venta de la copia de un programa en la Comunidad Europea se agota el derecho a la difusión de dicha copia en la Comunidad”,explica el catedrático Dr. Friedrich Rüffler de la Universidad de Salzburgo. “La normativa de la UE no presupone que un soporte tenga necesariamente que ser entregado. El hecho de que el software esté integrado o no en un soporte informático es indiferente”, añade.