El mercado de impresoras en España fue de más a menos el año pasado, según reflejan las cifras de ventas de la consultora Context, a las que ha tenido acceso CHANNEL PARTNER. Y es que mientras que en el primer trimestre del año, las ventas de impresoras de los principales mayoristas del mercado español avanzaron un 19,7%, en el segundo este ritmo de avance bajo hasta el 11,6%, y en el tercer y cuarto trimestre se quedó en el 6,9% y 7,4%, respectivamente.
Según Elena Montañés, country manager de Context, es normal que los crecimientos se hayan ido moderando porque la comparativa es con un año 2014 que ya fue bueno en términos de ventas. Hay que recordar que las vacas flacas en el mundo de la impresión llegaron hasta mediados de 2013, pero que a partir de ese momento el mercado no ha hecho sino remontar. “Como ha ocurrido con otras gamas de producto informático”, recuerda Montañés.
Si se analiza el mercado por formatos y tecnologías, se puede decir que en 2015 ganó sobre todo la tinta. Las impresoras multifunción de tinta dejaron unos ingresos un 22,3% superiores a los de 2014, según datos de Context. Mientras tanto, los multifunción láser sólo avanzaron un 1,2% en términos de ingresos. En equipos monofunción pasó lo mismo: los de tinta crecieron un 15,3%, mientras que los láser sólo aumentaron ingresos un 2,4%.
Context también confirma el buen momento de tecnologías emergentes como las impresoras 3D, que multiplicaron por tres sus ingresos. En número de máquinas, el mercado español adquirió en 2015 cinco veces más unidades de printers 3D que en 2014.
