Coincidiendo con el VMworld de Barcelona, Computing tuvo la oportunidad de conversar con Eran Brown, responsable tecnológico de Infinidat en la región de EMEA, una compañía de almacenamiento que basa su modelo de negocio en la disrupción de costes y en una escalabilidad sin precedentes en este mercado.
¿Cuál piensa que es la imagen de Infinidat en el mercado?
E. B.: La gran empresa tiene ante sí un gran desafío, dos tipos de cloud, el público (Amazon, Google, Microsoft) y el privado, en on premise. Algunas aplicaciones están en el primero y otras en el segundo. La línea divisoria de las dos nubes es difícil de discernir a quién pertenece. Imagina que la empresa tiene que desplegar 50 terabytes para un canal televisivo. Entonces tiene que ir a la nube pública, porque no tiene la capacidad necesaria. Por velocidad y agilidad se sitúa en ese entorno. Cuando vas a la nube privada, necesitas eficiencia de costes. Son dos fuerzas que se oponen y presionan dicha línea. La pública es de un 10 a un 20% más cara y las empresas buscan una economía de escala, ya que al final ganan en precio frente a las empresas pequeñas que solo tienen, por ejemplo, diez servidores. Una operadora no tiene los mismos precios que una pyme. Algunos quieren estar en la privada por criterios de seguridad, GPDR y otras normativas, pero pierden la agilidad de la nube. Lo que los clientes quieren tener es la agilidad de la pública dentro de su entorno on premise. Si desplegar en la pública me lleva cinco minutos y en la privada cinco horas, no me merece ahorrarme ese 20% en costes.
¿Cómo alcanzar esa agilidad en la nube privada?
E. B.: La nube privada tiene tres componentes principales: computación, redes y datos. Computación es el 90% de tu trabajo. Si quieres abrir un nuevo negocio, no hay gran problema. En la actualidad cada nueva aplicación que quieres poner en marcha necesita una gran cantidad de datos. Si no tienes la capacidad para su rendimiento, te quedarás bloqueado. En la nube pública, cuando quieres hacer algo, primero haces la aprobación, luego vas a la provisión y luego obtienes la factura. En la nube privada hoy -sin Infinidat- tú tienes primero la aprobación, luego hay que recibir el equipamiento, realizar la instalación física y, en último término, la configuración, y solo aquí obtienes el valor. Hoy, sin Infinidat, las empresas requieren cinco meses para el despliegue, porque cada uno de esos pasos suponen unas semanas para llevarlos a cabo.
¿Entonces cuál es la propuesta de Infinidat?
E. B.: Nuestro modelo es que la nube privada funcione con la misma agilidad que la pública. Para lograr esto, hay dos condiciones: un nuevo modelo de negocio, aprobarlo, empezar el proyecto y obtener la factura igual que en una nube pública. La cloud pública es solo Opex y la privada es casi todo Capex. Los clientes quieren a veces trabajar con Opex, en el nuevo modelo de negocio donde puedes hacer provisioning instantáneamente sin tener que pagar por adelantado, pero para hacer esto yo como vendedor te permito conseguir un petabyte de datos, aunque estés usando 300 o 500. No tengo que hacer ninguna inversión y el precio es razonable para mí. Necesitamos disrupción de costes, el almacenamiento tiene que ser más barato. De ahí que Infinidat es la única compañía que ofrece esta disrupción de costes y permite poner en marcha el nuevo modelo de negocio flexible. Un cliente puede usar un petabyte en algún momento en los próximos tres años, pero en este momento necesita manejar solo 250 gigabytes, de manera que la capacidad se va adaptando a las exigencias del negocio.
¿Infinidat es sinónimo de escalabilidad flexible?
E. B.: Todo el mundo puede escalar, NetApp, Dell EMC… pero hacerlo de una forma instantánea sin tener que esperar al procurement, la instalación y la configuración, eso solo lo hace Infinidat. Lo que hacemos en on premise es llevar el concepto de la nube pública a la nube privada.
¿Su compañía es de hardware o software o una mezcla?
E. B.: Nosotros nos dedicamos al almacenamiento definido por software. Los clientes no son integradores de sistemas y cuando quieren escalar quieren que funcione todo bien tanto en soft- ware como en hardware. Nosotros proveemos el appliance con el software en un precio muy bajo con una misma batería e idénticos componentes y todos los clientes usan la misma configuración que ha sido previamente testeada, por lo que se minimizan los problemas derivados de un producto multiproveedor.
¿Cómo ve el mercado español?
E. B.: Se trata de un mercado moderno y también hay muchas compañías tradicionales que dudan todavía en embarcarse en el nuevo modelo de negocio. En cualquier caso, veo un abanico de muchas empresas diferentes con una velocidad distinta en la adquisición de tecnología innovadora. La banca es uno de los sectores más proactivos en este sentido.
