ABANCA, entidad bancaria con presencia en España, Portugal y otros nueve países de Europa y América Latina, está evolucionando parte de sus sistemas tradicionales en tres capas (storage, virtualización y cómputo) a entornos hiperconvergentes en una única capa. De esta manera, se simplifica la arquitectura y la gestión de toda la infraestructura permitiendo, además, la automatización de tareas de mantenimiento, creación y lanzamiento de nuevos servicios.
En un sector como el bancario, que exige adaptaciones regulatorias constantes y ágiles, “es fundamental la creación de un entorno cloud mediante la integración de nubes híbridas, que se ha podido realizar de forma rápida y sencilla gracias a la solución VCloud Foundation de VMware”, indica Juan Luis Egido, Enterprise Account Executive de Dell Technologies. “El resultado de esta migración es la adopción de una arquitectura definida por software que facilita la reducción de costes de operaciones, la automatización de las tareas manuales, de mantenimiento y del ciclo de vida de las aplicaciones, la simplificación del despliegue de herramientas, el análisis predictivo de entornos basado en inteligencia artificial, la escalabilidad en un modelo Scale In-Out, para crecer gradualmente en el caso de que fuera necesario; y la posibilidad de integración futura con otros entornos de protección de datos (DPS) de Dell Technologies y VMware”, enumera Javier Abad, gerente de Técnica de Sistemas de ABANCA. “En definitiva, genera una mayor eficiencia a todos los niveles”.
Junto con su partner IPM, Dell Technologies aporta no solo la experiencia en el despliegue de la solución HCI VxRail, sino también la posibilidad de desplegar laboratorios y entornos de pruebas y, muy importante, ofrecer un soporte integrado de la solución hardware y software de VMware. Este último punto “es clave”, según Abad ya que “en ABANCA ya hemos sufrido en el pasado las dificultades de lidiar con los diferentes soportes cuando se produce una incidencia en la infraestructura en la que no está claro qué pieza y, por tanto, qué fabricante es responsable del origen del problema”.
Las tecnologías puestas al servicio de esta virtualización del entorno TI son VxRail, de Dell Technologies, y la suite de VCLoud Foundation, de VMware, integrada por sus componentes, como son vSphere, vROPS, vSAN, NSX-T, vRNi, etcétera.
Hacia un modelo de CPD definido por software
“Migrando nuestro modelo de gestión tradicional hacia un nuevo modelo en el que la infraestructura se entrega como un servicio nos beneficiamos, por un lado, de la reducción de los costes de operación y de los riesgos asociados a las intervenciones manuales mediante la automatización de las tareas de gestión y, por el otro, de la simplificación, automatización y, por tanto, agilidad en el despliegue de la infraestructura necesaria para los diferentes proyectos del banco”, explica Abad.
La inversión inicial del proyecto ha sido cercana a un millón de euros, considerando todos los costes de infraestructura hardware y software. No obstante, recientemente se han añadido nuevas inversiones para continuar creciendo en el número de nodos de esta solución, cuya puesta en marcha se ha visto afectada por la reorganización interna de proyectos del banco derivada de la crisis sanitaria por la Covid-19. Así, se calcula que será posible poner a funcionar esta nueva infraestructura para este mes de octubre.
Abad ha celebrado que, más allá de los imprevistos por la pandemia, no se han encontrado con mayores dificultades a la hora de implantar el proyecto, “de hecho, los primeros tests de rendimiento realizados previos a la puesta en producción fueron sorprendentemente buenos. En todo caso, sí hemos observado que nuestra experiencia interna en tecnologías de VMware ha facilitado, sin duda, la integración de esta tecnología”. También las últimas versiones de software de VMware con las que ya contaba la entidad han permitido la entrada y salida de cargas sin interrupción de servicio, desde y hacia sus otras granjas tradicionales.
ABANCA no quiere subir a la nube como infraestructura como servicio, sino más bien a través de plataforma o contenedores como servicio
En cuanto al retorno de la inversión, en el caso de las plataformas hiperconvergentes, en general, es prácticamente inmediato si consideramos los costes de almacenamiento en cabinas tradicionales. Sin embargo, comparando el coste de esta solución frente a otras soluciones hiperconvergentes más económicas de las que también dispone ABANCA, la estimación es que los ahorros generados por la gestión automatizada del ciclo de vida compensen este incremento de coste en aproximadamente 18 meses. Este plazo de retorno de inversión se va acortando a medida que la solución se va ampliando en número de nodos.
“Nuestra estrategia se sustenta en un esquema multicloud híbrido partiendo de una base consolidada en nuestra cloud privada”, añade Abad. “Llevamos años haciendo uso de diferentes servicios en las principales nubes públicas y, actualmente, estamos inmersos en el desarrollo de nuestro plan de transformación cloud priorizando las aplicaciones e infraestructura a mover teniendo en cuenta, para cada caso, el tipo de servicio, los riesgos asociados junto con su plan de mitigación, el aseguramiento del cumplimiento normativo, el análisis de alternativas entre los diferentes CSP y la evaluación de costes”. A pesar de haber realizado pruebas con éxito migrando cargas en caliente a nubes públicas con este tipo de tecnologías, el interés de ABANCA en el viaje a la nube no se hace principalmente a través de infraestructura como servicio, sino más bien a través de plataforma o contenedores como servicio. No obstante, esta solución posiciona al banco en un lugar privilegiado para mover las cargas de forma flexible y ágil si cambia su estrategia o surge una necesidad específica.