La operadora se ha visto obligada a recurrir al Captulo 11 en un intento de disear una nueva estrategia que libere a la compaa del peso de la deuda financiera derivada de las elevadas inversiones en la infraestructura de red y le permita concentrarse en su negocio ms crtico y tradicional. De esta forma, Teleglobe pretende abandonar algunas de las reas a las que ha dirigido en los ltimos aos sus nuevas estrategias, como hosting o transmisin de datos, precisamente aquellas en las que la compaa realiz mayores inversiones, para volver a poner nfasis en la venta de voz como mayorista para otros operadores.
Adems la compaa, que ha visto como dimita su anterior presidente Charles Childers, har hincapi en la reduccin del gasto. Como primera medida, se ha previsto el despido de alrededor del 50 por ciento de los empleados, reduccin que podra oscilar entre 850 y 900 puestos de trabajo. La mayor parte de ellos se producirn en Estados Unidos, que tendr que soportar la mitad de los despidos, mientras que Canad, sede de la compaa, slo asumir el 15 por ciento.
Algunos analistas consideran el actual proceso de reestructuracin como un paso previo para encontrar un comprador, si bien tambin hay que tener en cuenta el amplio nmero de operadores que, en una situacin similar, estn buscando llevar a cabo operaciones de corte parecido. Por el momento, y para salvar la delicada situacin, la compaa ha recibido 100 millones de dlares de liquidez financiera por parte de BCE, el operador canadiense que desembols 4.750 millones de dlares hace dos aos para adquirir Teleglobe.
A la hora de cerrar esta edicin, la filial espaola de Teleglobe, que cuenta con clientes como Telefnica, Ono, Comunitel o Jazztel, an desconoce los planes que desde la corporacin se tiene previsto abordar.
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