La popularización de los mensajes móviles multimedia (MMS) aún tardará entre dos y tres años para que comience a situarse a unos niveles relativamente cercanos a los actuales SMS (mensajes cortos de texto), según apuntó Niklas Gustafson, responsable de Desarrollo de Negocio de Havet. El directivo de la consultora adelantó además que dentro de algunos años habrá una convergencia entre SMS y MMS a medida que bajen las tarifas de los mensajes multimedia y siempre teniendo en cuenta que a través de MMS se puede enviar únicamente texto también.
A pesar del especial énfasis que las operadoras celulares españolas pusieron durante las pasadas Navidades en promocionar los MMS -con incluso ofreciendo un número determinado de forma gratuita-, lo cierto es que “aún no se puede hablar de un boom” de este tipo de mensajería, expresó Gustafson.
Un informe de Havet considera que los MMS deberán superar una serie de barreras para poder confirmar su éxito, entre las que cabe citar la interoperabilidad entre múltiples dispositivos -incluidos terminales de distintos fabricantes, donde existe interoperabilidad de software-, facilidad de manejo de los terminales, solventar los problemas de almacenamiento o precios asequibles para los usuarios.
En este sentido, los operadores deberán brindar a los abonados la posibilidad de almacenar los MMS en Internet, además de establecer unos precios que superen las reticencias iniciales de los usuarios, ya que son dos y cuatros veces más caros que los actuales SMS. De hecho, un 82 por ciento de los usuarios encuestados por Havet considera que los MMS tendrán éxito cuando los precios tanto de los terminales como de los mensajes no sean elevados (menos de 120 euros para un terminal y entre 0,20 y 0,40 euros por mensaje).
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