El operador de telecomunicaciones MCI -anteriormente conocido como Worldcom- aún se plantea como una alternativa a tener en cuenta por el resto de operadores europeos. MCI cuenta en Europa con una posición más que relevante: más de 150.000 clientes europeos y unos ingresos de 3.000 millones de dólares en la región EMEA, lo que supone el 13 por ciento del total de su facturación. Según datos de la propia MCI, la operadora cuenta en Europa con una cuota del cinco por ciento, que según sus propias estimaciones crece a un ritmo significativamente más rápido que en otras áreas.
Los analistas apuntan que si consiguen una adecuada recuperación del Capítulo 11 de bancarrota podría jugar un papel importante en las telecomunicaciones europeas, un mercado que consideran básico, al menos el área corporativa, en su estrategia.
Incluso analistas como Jean Claude Delcroix, de Gartner, consideran que su negocio europeo puede resultar como una de las claves de su recuperación. En su opinión, todo dependerá de si en los próximos seis meses consigue salir del Capítulo 11; si no entonces sí podría ceder una parte significativa de sus clientes.
El optimismo de MCI en Europa alcanza el punto de que afirman estar muy cercanos al punto de equilibrio financiero, con un cash flow positivo.