La Comisión Europea ha autorizado a Vodafone la compra de Singlepoint, un proveedor de servicios de telefonía móvil en el Reino Unido, así como el intermediario de esta sociedad para los abonados profesionales, Corporate 4U, al concluir que las maniobras no entrañan riesgos para la competencia en el mercado europeo.
Singlepoint, con más de dos millones de clientes, es uno de los principales actores del mercado británico de servicios a la telefonía móvil; además, sus actividades incluyen la evaluación de créditos, la gestión de tarifas, los enlaces y la facturación, al tiempo que adquiere sus clientes profesionales a través de Corporate 4U. Ambas sociedades están actualmente controladas por el holding británico Cauldwell.
En este contexto, tras examinar las operaciones, Bruselas ha concluido que no plantea incompatibilidades con la normativa europea sobre fusiones, dado que los niveles de competencia en el sector seguirán siendo suficientes tanto en el mercado de los servicios de telefonía móvil al por mayor, como al por menor.