Alcanzado el desafío que supuso UMTS, ahora el reto ha pasado a denominarse 4G, que toma el acrónimo de HSDPA. La nueva tecnología supondrá trasladar la realidad de la banda ancha al ámbito de la movilidad.
Según los datos que maneja Ericsson, actualmente hay ya 61 redes de 3G (WCDMA) desplegadas, que dan lugar a más de 22 millones de usuarios, el 60 por ciento aún ubicados en Japón, pero que han comenzado a expandirse a otras áreas como Europa o Estados Unidos. El salto a la denominada 4G es algo que ya tienen previsto buena parte de operadores, sólo limitados por la aceptación que puedan despertar los servicios UMTS tras un tortuoso periodo de espera y lanzamiento que ha durado más de dos años. La ventaja de HSDPA reside en que les permite incrementar el caudal de tráfico de los 384 Kb de UMTS hasta los 14 Mb, lo que les daría la llave para lanzar el llamado triple play que caracteriza a la banda ancha en redes fijas (telefonía, acceso a Internet y televisión), pero trasladada a entornos móviles. Es más, la convergencia con el entorno fijo está a tiro de piedra si se consideran tres parámetros: servicios, dispostivos e infraestructura de red.
Aunque, según los datos que maneja Ericsson, actualmente apenas existen tres redes HSDPA desplegadas: dos en Japón y una tercera en Estados Unidos de la mano Cingular.
En España, Telefónica Móviles y Amena, los dos operadores móviles que recurren a Ericsson aún no han desplegado este tipo de soluciones, pero se espera que lo realicen en los próximos, según Antonio Campaña, experto en Soluciones y Acceso Móvil de Ericsson. Por su parte, la filial española de Vodafone, que en la parte de acceso va de la mano de Nortel, ya ha realizado pruebas.
Para los operadores, la ventaja de HSDPA consiste en que les abre la puerta a una banda ancha real en entornos móviles pudiéndose integrar con la infraestructura 3G ya existente, ya que no requiere el despliegue de nuevas antenas. La primera versión de HSDPA está ya disponible y aporta 4,3 Mb de velocidad, mientras que la segunda estará lista a partir de 2006 y aportará 14 Mb. A partir de ahí, el camino queda expedito para la llegada de la Super3G, actualmente en fase de desarrollo y que llegará incluso a proporcionar caudales de 100 Mb a partir de 2009, según los datos que manejan los expertos de Ericsson.
Pero HSDPA no vendrá sola. A la nueva generación de telefonía le seguirá una nueva remesa de terminales móviles que permitirá adaptarse a las ventajas que ofrece HSDPA. Antonio Alcalde, experto en HSDPA de Ericsson España, asegura que los primeros dispositivos adaptados a esta tecnología llegarán en forma de tarjeta PCMCIA a finales del presente año. De hecho, Sony Ericsson las tendrá preparadas para la segunda mitad del año a una velocidad de 1,8 Mbps, ya que el primer empuje de la denominada 4G irá dirigido hacia el segmento corporativo. Dentro de un año aparecerán los primeros teléfonos como tal, que seis meses más tarde vendrán acompañados por una producción en volumen, mientras que las tarjetas saltarán a la segunda generación con 7,3 Mbps por esas mismas fechas.
Las bases ya parecen estar puestas si se contempla el lanzamiento incluso de ofertas de tarifa plana para entornos móviles sobre UMTS, como ya han realizado algunos operadores europeos como Vodafone Suecia (54 euros mensuales con capacidad hasta 1 Gb), 3 Suecia (perteneciente a Hutchinson, y con una oferta de tarifa plana para datos de 43 euros mensuales) o el estadounidense Cingular & AWS para tecnología EDGE. Incluso, Vodafone en Alemania ha lanzado ofertas para el mercado de consumo intentando competir con las operadoras de fijo: 1.000 minutos de voz por 20 euros al mes o 5 GB de acceso Internet por 17 euros. En España es de suponer que las tarifas planas entornos móviles avanzados se encuentren a la vuelta de la esquina. Todo con la intención de fomentar el progresivo crecimiento de los servicios de datos, un área primordial en la estrategia futura de los operadores para aumentar los ingresos procedentes de los servicios de voz.
Pero a pesar de que HSDPA se encuentra aún en sus albores, a la vista ya ha aparecido su relevo, la citada Super3G, que se verá incluso complementada con tecnologías como DVB y MBMS, actuales estándares en desarrollo, que permitirán trasladar todo el mundo de la televisión en los terminales móviles, otro paso más en el puzzle que suponen los servicios de datos en entornos móviles.