Telefónica de España tiene previsto impulsar su estrategia de despliegue de la tecnología Wi-Fi como consecuencia de la madurez de este mercado, además de la futura utilización de estos emplazamientos por parte de Telefónica Móviles para ofrecer servicios de transmisión de datos basados en esta tecnología en determinados entornos de negocio.
“Hasta ahora el despliegue se ha centrado en localizaciones con perfil de usuarios empresarial. Ahora queremos aumentar el perfil de usuarios del servicio, por lo que se requiere un aumento cuantitativo y cualitativo de las localizaciones”, explican fuentes de Telefónica, que según los datos que maneja la propia operadora cuenta con una cuota de cobertura superior al 80 por ciento.
La estrategia diseñada por Telefónica prevé finalizar el presente año con entre 2.300 y 2.500 zonas ADSL Wi-Fi, dando prioridad a las localizaciones en todas las capitales de provincia, para luego acometer otros municipios de cierta importancia. “La necesidad por parte de nuestros clientes en torno a soluciones que le proporcionen movilidad y banda ancha, la extensión a distintos perfiles de usuarios y continuar aumentando la cobertura, tanto en entorno nacional como internacional, son los ejes de la estrategia”, explican desde la operadora.
Pero la apuesta de Telefónica no es sólo en España sino también en un ámbito internacional ya que pretende ampliar la cobertura del servicio mediante acuerdos con otros operadores Wi-Fi fuera de España.
La inversión que maneja Telefónica para esta nueva fase de despliegue (2005-2006) se sitúa en torno a 10 millones de euros, una cifra similar a la destinada en la primera fase, en la que la compañía desplegó casi 500 puntos de accesos, si bien en el presupuesto de la primera fase se incluía también el desarrollo de plataformas de red, gestión y back end.
Como proveedores, Telefónica de España cuenta con Cisco, que ya colaboró en la primera fase de despliegue, y Alcatel, este último apoyándose en el fabricante canadiense Colubris, con el que llegó a un acuerdo en el año 2002 para comercializar su tecnología. Ambos fabricantes se reparten el despliegue aproximadamente a partes iguales, según las mismas fuentes de Telefónica.
La aceleración de la estrategia de Telefónica en el área de Wi-Fi se ha visto amparada además en múltiples acuerdos con hoteles, salas VIP de terminales de transporte, etc. Sin embargo, el último de ellos ha sido con la Asociación Española de Centros de Negocio firmado el pasado 8 de junio-, que supone el equipamiento Wi-Fi de 118 establecimiento pertenecientes a la Asociación.
La creciente demanda de los clientes y su extensión a otros perfiles de usuarios menos profesionales ha impulsado la oferta de Telefónica en este servicio. De hecho, el pasado mes de noviembre lanzó el módem/router 802.11g, con capacidad a 54 Mbps para el segmento de servicios Wi-Fi para entornos privados.
Actualmente, Telefónica cuenta con un total de 16.000 clientes de sus servicios Wi-Fi, bien en entornos públicos o privados, cuando a mediados del pasado año disponía únicamente de apenas 3.500 usuarios. La operadora ha estructurado su oferta Wi-Fi tanto para entornos públicos, donde el objetivo es llegar a esos 2.500 puntos de accesos, y entornos privados, con usuarios instalados routers Wi-Fi en sus redes corporativas (solución ADSL LAN Wi-Fi) para evitar el despliegue de cableado.
