Lifesize acaba de lanzar al mercado su servicio de videoconferencia en la nube. Su apuesta supone la integración de hardware, software e infraestructuras de comunicaciones para que las empresas, y en especial las personas que trabajan en ellas, puedan permanecer conectadas mediante cualquier dispositivo, incluso con las salas de conferencias. Juan Aracil, country manager de Lifesize para España y Portugal, asegura que el modelo cloud trae a las empresas una forma de gestionar sus comunicaciones de video mucho más fácil, económica y escalable. A su juicio, estamos asistiendo al declive de las soluciones extremadamente caras y con limitada comunicación con terceros, como es la telepresencia, que no responden ya a las necesidades reales de unas empresas que intentan expandirse a nuevos mercados y que cuentan cada día con mayor número de profesionales destacados en delegaciones y proyectos repartidos por todo el mundo.
La gente asocia videoconferencia con aplicaciones populares, como Skype. Incluso son muchas las pequeñas y medianas empresas que utilizan esta aplicación gratuita para sus comunicaciones. ¿Cree que puede construirse un modelo de negocio rentable sobre este tipo de servicios?
Soluciones de video llamada residenciales como Skype han traído muchísima notoriedad y reconocimiento sobre lo que la comunicación por vídeo puede aportar a una organización. Sin embargo, las organizaciones quieren avanzar a soluciones de mayor escalabilidad y seguridad, que permitan la integración con sus sistemas y la interoperabilidad con equipos de sala de otros fabricantes. Nuestra oferta, desde Lifesize, consiste en un servicio profesional de videoconferencia estándar, interoperable con las inversiones ya realizadas por las organizaciones en este campo, desde la sala de reuniones hasta los terminales personales. Lifesize quiere hacer universal el servicio de videoconferencia, y facilitar la oportunidad de poner en contacto a personas en cualquier parte del mundo y mediante cualquier dispositivo, incluyendo la conexión con las salas de reuniones en las sedes corporativas de las empresas.
Entre el modelo que representa Lifesize y el caracterizado por los servicios gratuitos, ¿qué otros modelos hay en el sector?
Hay cuatro modelos en el mercado para proporcionar servicios de videoconferencia a las organizaciones. Uno es el constituido por los servicios gratuitos en la nube, al que nosotros aludimos como vídeollamada, más que videoconferencia. Es económico, pero con notables limitaciones de escalabilidad, gestión e integración con los sistemas operativos en las organizaciones. Otro modelo es el de los servicios de web-conferencing, que se basa en la compartición del escritorio y la comunicación de audio. Se están dando los primeros pasos para incorporar vídeo en las comunicaciones, y aún está lejos de aproximarse a lo que podría ser una reunión presencial, y carecen también de integración con la sala de reuniones. Un tercer método, quizás el más tradicional en las organizaciones, es la inversión en sistemas locales dentro de sus propias redes. Este modelo, que todavía sigue moviendo una parte importante del mercado, es muy costoso. La tendencia hacia la industrialización del servicio de videoconferencia conlleva la externalización de la totalidad o parte del mismo en la nube para hacer posible la interconexión con terceros. Hay un cuarto modelo, al que clasificamos como servicios de videoconferencia en la nube, estilo “Meet Me”, y que básicamente se define como un punto de reunión para los participantes que se incorporan desde sus terminales de videoconferencia o terminales personales. Son llamadas programadas y requieren una gestión detrás.
Este último modelo se corresponde directamente con el que ofrece Lifesize…
Desde Lifesize hemos querido proporcionar una alternativa al servicio de videoconferencia en la nube con la más alta calidad y replicando la forma en que la gente se comunica. Hemos hecho posible que participar en una videoconferencia sea tan sencillo como realizar una llamada de teléfono. Lifesize cloud permite una llamada programada, pero también una llamada personal como lo hacemos con nuestro móvil. A esta posibilidad de estar siempre conectados, desde cualquier terminal de sala o dispositivo personal, lo llamamos la Experiencia de Conexión Total.
¿Cuál es la oferta de valor que lanza Lifesize al mercado?
Quizás, el rasgo diferencial es que hemos trabajado en pos de una tecnología estándar, que permite minimizar el riesgo tecnológico de las empresas en varias direcciones. Lifesize se integra con la tecnología de otros fabricantes que están también dentro del mundo de los estándares, lo que reduce los costes para las empresas y simplifica el acceso a estos servicios. También hemos simplificado el uso de la videoconferencia y su administración, y hemos sacado este servicio del ámbito interno de la empresa para hacer posible que éstas puedan hablar con sus clientes, colaboradores y proveedores de manera sencilla y fácil. Ahí es donde el estándar da el valor adicional para que estas tecnologías sean replicables en distintos escenarios e interoperables.
¿Qué ha ocurrido con aquellas plataformas propietarias multipantalla que residían en las salas nobles de las grandes corporaciones?
Actualmente, es muy difícil encontrar empresas dispuestas a invertir en este tipo de soluciones, dado que por mucho menos coste se encuentran otras muy similares, basadas en estándares y que interoperan con muchas de las soluciones del mercado. Emplean además poco ancho de banda y permiten una comunicación entre distintos entornos sin dificultad.
¿Qué cifra de negocio mueve actualmente la videoconferencia en el mundo?
El número de terminales instaladas en el mercado está creciendo cerca de un 8% en los últimos cinco años, y el nivel de facturación crece a un ritmo del 5% en el modelo tradicional de inversión local. Nuestras estimaciones es que el mercado de videoconferencia en la nube crecerá 2 o 3 veces por encima de estas cifras en el corto y medio plazo.
¿Cuál es el perfil de los clientes de videoconferencia?
Nuestro modelo cloud se dirige a empresas que tienen claro que el coste es importante para ellos y que estar siempre conectado les dota de más valor. En este sentido, puede ser una empresa grande o pequeña, si bien la pequeña y mediana empresa, que no tiene recursos internalizados, es mucho más afín a los servicios en la nube.
¿Cuál es el próximo hito en la evolución de la videoconferencia?
Lifesize ha incorporando soluciones que provienen de otros sectores como es el caso de la webRTC. Se trata de una tecnología aún en sus inicios que está desarrollando el sector de los navegadores de Internet y que permite que un cliente sea capaz de acceder a su organización solo con un navegador, sin la instalación de ningún “plugin”. Este tipo de soluciones son el paso necesario que conducirá a la creación de plataformas de comercio online.