“Estamos percibiendo que hay una tendencia hacia la transformación digital del edge”, explica José Tormo, director regional del Sur de Europa en HPE Aruba. La idea es intentar dar una mejora de experiencia a través de la movilidad, el cloud y el IoT. Gartner estima que en dos años va a haber 6.400 millones de dispositivos conectados, y los gastos en la nube crecen exponencialmente. Estas tres tecnologías son los ingredientes básicos del framework que ha creado HPE Aruba, que parte de una infraestructura de extremo a extremo y que busca dotar de una inteligencia para que la experiencia de usuario de la conexión de la red sea óptima y haga que la empresa pueda sacarle rendimiento económico: “Nuestros clientes buscan la monetización de esas inversiones”, confirma el directivo.
Las soluciones de esta firma que adquirió HPE hace dos años están preparadas para el nuevo estándar inalámbrico, 802.11ax: “Wifi 6 permite no solo dar más ancho de banda sino controlar mejor cómo acceden los usuarios a las redes en unos entornos de alta densidad de usuarios”. Otro beneficio que conlleva es asegurar que los dispositivos que componen la red cumplan con su misión de enviar los datos a los servidores, los cuales tienen que llegar en el tiempo y forma adecuados; así como poder evitar que sean atacados y manipulados, como es el caso de cámaras IP o máquinas de vending que han servido de cabezas de puente para atacar a grandes compañías.
Colateralmente, su plataforma de securización ClearPass permite el control de accesos y orquestar todos los componentes de seguridad de la propia empresa. Tormo comenta que están en todos los sectores. “Históricamente los sectores que más aceptación han tenido son la educación (cómo profesores y alumnos comparten contenidos digitales) y el retail (que tiene un gran horizonte)”. Por ejemplo, en una tienda grande con una infraestructura wifi que permite a los vendedores controlar todo el stock de las baldas, se pueden detectar aglomeraciones en las cajas y mandar una alarma a un empleado para que acuda con un TPV móvil. Todo ello de forma automática.
Prácticamente las grandes cadenas de retail de nuestro país tienen contratado a HPE Aruba. Muchas utilizan estos mapas de calor para conocer los flujos del centro comercial, de tal forma que se puede comprobar que un alto porcentaje de personas frecuentan determinados puntos y se puede decidir qué tipo de productos se ponen a la venta. “Entender el comportamiento de tus usuarios, para darle una mejor experiencia y te sirva como un retorno de inversión”, son los tres mandamientos de Aruba.
Esto es extrapolable a los hoteles, de manera que un viajero puede ingresar en un establecimiento sin pasar por recepción para el checkin y ocupar su habitación haciendo uso del móvil. “También detecta sus propios consumos y todo lo centraliza dentro de un sistema IP”, ilustra Tormo. Un tanto de lo mismo sucede en entornos hospitalarios. Cuando un médico va a visitar a pie de cama a un enfermo, le muestra una ventana popup con su historial clínico y la medicación que le corresponde. “De esta manera se aceleran los procesos y se evitan los errores”. En los dos años que Aruba está en España (40 empleados) su crecimiento ha sido muy favorable, como constató en su visita a Madrid durante el HPE Discover de noviembre, el CEO Antonio Neri, quien afirmó que ha sido uno de los grandes aciertos de la multinacional. “Estamos creciendo a doble dígito con gran presencia en administración pública y en otros sectores de actividad como retail, banca y finanzas”, resume José Tormo.