La tecnología como clave de productividad

El Encuentro de Tecnologías de la Información en Aragón ha dejado patente la necesidad de seguir invirtiendo en el rediseño de procesos para que empresas y Administraciones ganen en productividad.

A pesar del buen comportamiento de la economía española en comparación con nuestros vecinos europeos, por todos es conocida la mala situación de España frente a la Unión Europea en cuanto a parámetros productivos.

No obstante, “existe una relación directa entre el uso de la tecnología y el incremento de la productividad en los países industrializados”.

Así lo destacó José Antonio de Miguel, miembro del Comité Ejecutivo de la Confederación de Empresarios de Zaragoza (CEZ), quien tras ser presentado por Ambrosio Rodríguez, director de COMPUTING España, inauguró un nuevo Encuentro de Tecnologías de la Información, esta vez celebrado en Zaragoza como ubicación representante de la Comunidad Aragón y organizado por COMPUTING en colaboración con Sun Microsystems Ibérica y Oracle Ibérica.

Esta relación directa de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) con la productividad quedó sobre todo patente desde 1995,

Siendo el mayor representante de las organizaciones empresariales de Zaragoza -engloba a más de cien organizaciones de todos los sectores productivos y alberga a más de 20.000 compañías-, la CEZ pretende precisamente dar a conocer esta necesidad, ”ayudando a las empresas aragonesas a subirse al tren de la tecnología, ganar en productividad y transformarla posteriormente en valor añadido”.

Según un informe de DMR Consulting sobre el avance de las TICs en las Comunidades autónomas de nuestro país, Aragón cuenta con un indicador del 4,73 en cuanto a adopción tecnológica, 0,24 puntos por debajo de la media nacional. Y esto a pesar de haber crecido en todos los campos excepto en el uso del PC en las empresas.

Sin embargo, esta situación puede considerarse como buena, ”sobre todo porque esa puntuación debe ponerse en el contexto de una región en la que tenemos una gran superficie y baja densidad de población o que la gran mayoría de las empresas cuentan con menos de diez trabajadores y se concentran en Zaragoza”.

Dicho esto, resulta necesario seguir fomentando la adopción de tecnología por parte de empresas y Administraciones, ”ya que no se trata sólo de adquirir tecnología, sino que se deben transformar los procesos organizativos de las empresas”, continúa De Miguel.

Y es que existe un nuevo paradigma tecno-económico, a modo de tercera revolución industrial, ”en el que la gestión de la información y la sociedad de los trabajadores del conocimiento marca la pauta como materia prima”.

La tecnología actúa sobre ese imput que es la información y lleva a las empresas hacia nuevas estructuras y modelos de trabajo para competir en la economía globalizada. Ese nuevo modelo transforma las inversiones TIC en activos tecnológicos que deben convertirse en impactos organizativos para poder aprovechar al máximo todas las ventajas competitivas ligadas a cualquier tecnología, como pueden ser los sistemas ERP o CRM. Por tanto, es necesario aplicar un rediseño de procesos para aprovechar las ventajas de la tecnología, “y trabajar en modelos de gestión adaptados a esa nueva ecología de la información”. Igualmente, la promoción de Parques Tecnológicos y clusters de empresas TIC ha favorecido la fijación del conocimiento en Aragón, aunque, eso sí, “las TIC no deben ser consideradas como un fin sino como un medio para mejorar la productividad de las organizaciones”, sentencia el responsable de la CEZ.

Pero no sólo la empresa privada debe adoptar este paradigma, sino que la transformación de procesos resulta igualmente vital en el ámbito de la Administración, a quien los ciudadanos le reclaman cada vez más valor añadido en los servicios que proporciona a través de múltiples canales.

Esta necesidad quedó patente en la Mesa Redonda celebrada durante el evento, que con el título Nuevas tendencias para generar valor añadido reunió a destacados responsables de Tecnología de empresas y Administración, junto a suministradores y usuarios.

El director gerente de Aragonesa de Servicios Telemáticos, José Miguel Galán, abrió el debate argumentando que “lo más importante de nuestro cometido es la realidad de colaboración entre las diferentes Administraciones de Aragón”.

De hecho, esta entidad de carácter público que tiene como función mejorar los procesos internos de sus Administraciones, comenzó a desplegar hace doce años una capa de conectividad que derivó en la Red Aragonesa de Comunicaciones Institucionales (RACI), “que hoy en día conecta a más de 300 Ayuntamientos, Universidades y organismos públicos de la región”.

Por encima, Aragonesa de Servicios Telemáticos ha situado la infraestructura (servidores, bases de datos, etc.), “y por encima la información y los servicios que se dan al ciudadano”, continúa Galán.

El resultado es “una plataforma única de servicios”, ya que en un 80 por ciento de las interacciones el ciudadano participa con más de una Administración, “pero de forma transparente para que complete sus trámites fácilmente y a través de múltiples canales incluyendo Internet, movilidad, la TDT o portales de voz”.

Completando esta visión, Adrián Martínez Cabrera, director general de Organización, Administración y Servicios del Gobierno de Aragón, indicaba que “el Gobierno es la mayor empresa de servicios de Aragón, y gracias a la RACI como red corporativa de banda ancha hoy es posible conectar más de 1.800 edificios territoriales”. Y a pesar de que en la Comunidad hay mucha dispersión geográfica, Aragón cuenta con una posición geopolítica privilegiada, “algo que nuestras empresas deberían aprovechar más y nuestra obligación es facilitárselo, al igual que simplificar la vida del ciudadano en los trámites administrativos”.

Para obtener un símil de cómo debe actuar la empresa privada, Helmut Hampp, director de Tecnologías de la Información EMEA 2 de BSH Electrodomésticos, apuntó que “al igual que la Administración, para gestionar correctamente la tecnología es importante la colaboración entre todas las áreas de negocio para compartir el know-how e identificar nuevas oportunidades de mercado”.

Como fabricante alemán de electrodomésticos de línea blanca líder en España con marcas como Bosch, Siemens, Balay y Lynx y que cuenta con siete fábricas en nuestro país, el responsable de BSH también entiende que “es necesario dar más importancia al rediseño de procesos que a la propia tecnología”. Estos nuevos procesos, que emplean a la tecnología como medio y no como fin, le han llevado a transformar la interacción con el cliente, socios y proveedores para ganar ventaja competitiva en las distintas fases de diseño, fabricación, comercialización y soporte. Precisamente y como apuntó desde el lado de los suministradores Ricardo Martínez, director de soluciones de Oracle Ibérica, para poder compartir ese conocimiento entre todos los departamentos de una empresa “se hace imprescindible que la información no sólo pueda almacenarse correctamente, sino que se acceda a ella de forma transparente por parte del usuario, en el momento y lugar que lo precise”, con sistemas que garanticen la continuidad del negocio y que administren la seguridad de la información.

En esta evolución que utiliza la tecnología como medio para rediseñar procesos y obtener valor tiene mucho que decir una empresa como Sun. Josep Figols, director Territorial Noroeste de Sun Microsystems Ibérica, ve cómo “hemos pasado de la Sociedad de la Información a la Era de la Participación, un mundo en el que todos estaremos conectados en el Real World Web”. A todo ese cambio de mentalidad y rediseño de procesos va asociado de nuevo el tema de la productividad. Para finalizar con la visión de la empresa privada, Luis González Peralta, director de Sistemas de Master-D, comentó que “la productividad puede entenderse como incrementos de facturación, asentamiento en el mercado o como organizadora de nuevos procesos y generadora de nuevas oportunidades de negocio”. Con la central en Zaragoza y más de 50 delegaciones por todo el país, Master-D está volcada en facilitar el intercambio de conocimiento entre todas sus filiales, “pero este rediseño de procesos debe implicar a todo el personal de una organización, y no sólo al departamento de Sistemas o la Dirección”. Finalmente, Martínez Cabrera cerraba el debate argumentando que “nuestro objetivo es modernizar la Administración, pero eso sólo puede llevarse a cabo con una transformación de procesos”. Para ello, el Gobierno de Aragón realizó en 1993 una auditoría interna en la Administración que dio como resultado el Plan de Renovación y Modernización Administrativa.

Hoy este Gobierno gestiona más de 500 procesos administrativos, y en un 60 por ciento de ellos intervienen el Estado y los organismos locales. Por tanto, “toda la modernización de las Administraciones pasa por la interoperabilidad entre ellas, reinventar procesos y avanzar hacia esa Administración participada”.