La Dirección General de Interior de la Comisión Europea fue la encargada de seleccionar a un consorcio encabezado por Steria y basado en tecnología de HP que permite a los estados adheridos al tratado de Schengen el intercambio de datos relacionados con los visados de tránsito o estancias cortas mediante la conexión de los consulados ubicados en países de fuera de la Unión Europea y en todos los accesos fronterizos a la zona. El sistema procesa actualmente una media de 4.000 solicitudes de visado por día con picos de hasta 11.000. Hasta ahora el sistema ha procesado aproximadamente un millón de solicitudes.
El Área Schengen se ha ido ampliando desde su nacimiento en 1985 hasta abarcar 26 países con incorporaciones periódicas como la de Liechtenstein que se adherirá dentro de poco. Su objetivo es crear un gran espacio dentro del cual la gente pueda vivir, trabajar y viajar, Sin embargo, y aunque la mayoría de las personas con visado respetan las normas, también pueden ocurrir casos de ilegalidad. El sistema VIS ayudará a combatir y prevenir los comportamientos fraudulentos (como la venta de visados a otros Estados de la Unión Europea cuando la solicitud ha sido rechazada) vinculados a actividades como el tráfico humano y el terrorismo. La regulación de visados concedidos en el área de Schengen ayudará a los Estados miembros en su compromiso de garantizar una Europa más segura.
Para asegurar que VIS sea un sistema robusto, que funcione correctamente e integre a la perfección todos los sistemas satisfaciendo los requerimientos tanto de la Comisión Europea como de los Estados miembros, se han realizado durante meses extensas pruebas y puestas a punto antes de dar luz verde a la entrada en funcionamiento del sistema. Dado el alto número de actores implicados y la sensibilidad política en torno al sistema y su puesta en marcha, la Comisión Europea y la nueva Agencia Europea que asumirá su gestión desde finales de 2012 seguirán supervisando cuidadosamente su funcionamiento.