La división de telefonía móvil de Google, Motorola, pasará manos de Lenovo en una operación valorada en 3.000 millones de dólares -exactamente 2.910 millones-), dos años después de que fuera adquirida por la propia Google por 12.500 millones de dólares. La operación no ha sido muy rentable para Google que termina vendiéndola por la cuarta parte de lo que tuvo que desembolsar. Y es que Google no ha sabido sacarle partido a Motorola y en estos años ha ido reduciendo tanto su plantilla como la gama de dispositivos que lanzaba al mercado.
La operación representa además la mayor operación de compra dentro del sector tecnológico para una firma china sobre el mercado estadounidense, su principal competidor y presidido por el liderazgo de Apple. Para Lenovo supone a su vez acaparar de nuevo las portadas días tras anunciar que adquirirá los servidores de gama baja de IBM por 2.300 millones de dólares y afianzar su presencia en el sector tecnológico -fue en 2005 cuando decidió la compra de los PC de IBM-.
Para Google finaliza una aventura dentro del mercado de la telefonía móvil que apenas ha tenido repercusión. Lenovo intentará hacerse un hueco frente a la mencionada Apple y Samsung, y la también china Huawei, al tiempo que buscará tener mayor presencia en los mercados europeo y de EEUU.