En los últimos 10 años, la tecnológica española BQ ha pasado de ser un proveedor de USB personalizables a competir en electrónica de consumo con grandes firmas globales; de ser un pequeño grupo de emprendedores locales a tener 1.000 empleados y operar en el mercado internacional.
Su crecimiento y su expansión geográfica les exigía replantearse cuál era su propósito y su misión como marca. Para definir todo ello y crear una nueva marca sólida y con recorrido, que pueda competir al nivel de las más grandes, la consultora experta en marcas Saffron ha desarrollado un profundo trabajo estratégico así como de identidad visual.
Fruto del análisis realizado, Saffron ha definido el propósito y misión de la marca BQ apoyándose de forma fiel en el espíritu responsable, honesto, ambicioso y didáctico de la compañía: “Ayudar a entender la tecnología, animar a utilizarla e inspirar a todos a desarrollarla”, independientemente del perfil, la generación o las aspiraciones de cada persona.
“Estamos convencidos de que la tecnología es la clave para mejorar el mundo y hacerlo más justo”, comenta Alberto Méndez, fundador y Consejero Delegado de BQ. “Por eso sentimos que nuestra misión es conseguir que la tecnología esté al alcance de todos, que la usen desde los más pequeños hasta los ancianos y que la desarrollen”, continúa.
“Nos encontramos muy cómodos e identificados con la estrategia que hemos definido junto a Saffron porque refleja lo que sentimos, lo que hemos sido y hemos querido hacer desde que creamos esta compañía”, dice Rodrigo del Prado, fundador y Director General Adjunto de BQ.
De acuerdo con Gabor Schreier, Director Creativo Ejecutivo de Saffron, “La nueva identidad visual de BQ da vida al propósito de la marca a través de su símbolo, que enciende nuestra relación con la tecnología y la pone a nuestro servicio”.