Facebook se renombra como Meta, alejando su enfoque de las redes sociales y hacia lo que llama el metaverso, o ‘Internet encarnado’, un mundo de conectividad multicanal y realidad virtual y aumentada.
La medida, que era ampliamente esperada después de que las historias de un cambio de nombre inminente circularan la semana pasada, fue anunciada el jueves por la compañía en su informe de ganancias del Q3 y por Mark Zuckerberg en una publicación de blog.
En su informe de resultados, la compañía explica que a partir del próximo trimestre se dividirá en dos segmentos, cada uno de los que reportará sus propios resultados financieros. La familia de aplicaciones (FoA) incluirá Facebook, Instagram, Messenger, WhatsApp y otros servicios, mientras que Facebook Reality Labs (FRL) se referirá a “hardware, software y contenido de consumo relacionados con la realidad aumentada y virtual”.
Al explicar el movimiento, Zuckerberg dice: “En este momento, nuestra marca está tan estrechamente vinculada a un producto que no puede representar todo lo que estamos haciendo hoy, y mucho menos en el futuro. Con el tiempo, espero que seamos vistos como una empresa metaversa, y quiero anclar nuestro trabajo y nuestra identidad en lo que estamos construyendo”.
Agrega que la compañía ahora será “metaverso primero, no Facebook primero”. La medida se produce cuando la compañía enfrenta críticas sin precedentes tras las filtraciones y revelaciones de la denunciante Frances Haugen, quien acusó a la compañía de “priorizar las ganancias sobre la seguridad”, y será vista por muchos críticos como un esfuerzo para desviar la atención de estos temas.
El blog de Zuckerberg no menciona ninguno de los problemas de la compañía, aunque en una sección titulada ‘Quiénes somos’ habla vagamente de aprender de “luchar con problemas sociales difíciles”
En cambio, habla líricamente sobre el potencial del metaverso donde las personas pueden “teletransportarse” como hologramas a la oficina o a la casa de un amigo: “Sentirse verdaderamente presente con otra persona es el sueño final de la tecnología social”.
El nombre de Zuckerberg verifica la importancia de la privacidad y la seguridad, los estándares abiertos y la interoperabilidad en el metaverso, así como las “nuevas formas de gobierno”, pero sin detalles. Más reveladora, tal vez, es la mención, en el mismo párrafo, de “apoyar proyectos criptográficos y NFT en la comunidad”. Facebook ha estado tratando de integrar los pagos en su plataforma desde hace algún tiempo, como lo ha hecho Tencent de China con WeChat Pay, aunque su criptomoneda Libra (rebautizada como Diem) aún no ha avanzado debido a las preocupaciones regulatorias expresadas por muchos países. No cabe duda de que la empresa querría que su metaverso tuviera su propia moneda.
La reestructuración y el cambio de marca de Facebook se hacen eco de un movimiento similar en 2025 por parte de Google, cuando el motor de búsqueda homónimo se convirtió en uno de una gama de productos (aunque, con mucho, el más grande y lucrativo) bajo el paraguas del holding recién formado Alphabet.
