Un nuevo estudio de Accenture concluye que las empresas con aplicaciones empresariales muy interoperables tienen mayor capacidad para prosperar en medio de la incertidumbre y lograr un mayor rendimiento financiero.
Pero ¿qué entendemos por interoperabilidad? La interoperabilidad de aplicaciones empresariales es una arquitectura de aplicaciones que permita una visión de procesos E2E, independiente de las aplicaciones que soporten los proceso, que los datos fluyan a través de las aplicaciones y que facilite una experiencia de usuario, todo ello con el objetivo final de generar información de valor para una empresa.
El año pasado, las empresas con alta interoperabilidad -que son una de cada tres empresas encuestadas (34%)- aumentaron sus ingresos seis veces más rápido que aquellas con baja interoperabilidad y están listas para añadir cinco puntos porcentuales más al crecimiento de sus ingresos anuales.
El informe, titulado “Liberando Valor: acelerando el crecimiento a través de la interoperabilidad” (Value Untangled: Accelerating radical growth through interoperability), contó con la opinión de 4.000 directivos de 19 sectores en 23 países, España incluida. Los datos reflejan que sólo en los dos últimos años, una de cada dos empresas (49%) adoptó nuevas tecnologías y transformó su negocio más rápido que nunca, y el 40% transformó varias partes de su negocio al mismo tiempo buscando una mayor interoperabilidad. Una alta interoperabilidad ayuda a las empresas a conseguir la agilidad que necesitan para llevar a cabo una transformación adecuada. Al utilizar aplicaciones que interactúan fácilmente entre sí para permitir el intercambio de datos, una mayor transparencia y participación humana, las organizaciones pueden pivotar más rápidamente y aprovechar nuevas oportunidades.
“Aunque el concepto de interoperabilidad no es nuevo, la tecnología que lo hace posible de forma eficiente y rentable está por fin al alcance de la mayoría de las empresas”, afirma Jordi Roca, managing director de Accenture y responsable de Tecnologías Empresariales e Industriales. “La interoperabilidad además nos permite acelerar dos puntos básicos para el éxito empresarial. Por un lado, acelerar la colaboración, romper los silos aún existentes y tener una visión más transversal empoderando a las personas para lograr mejores resultados. Y, por otro, comprimir la transformación (compressed transformation), liberando más valor en menos tiempo. Una de cada tres empresas ha priorizado este nivel de agilidad para acelerar el crecimiento de los ingresos, la eficiencia y la resiliencia.”
En un mundo tan cambiante y con acelerada convergencia de sectores, la arquitectura de aplicaciones se ha complicado enormemente. La mayoría de las empresas tienen ahora más de 500 aplicaciones, y ocho de cada diez (82%) dicen que seguirán ampliando su arquitectura de aplicaciones, lo que hace aún más necesario un enfoque interoperable. Como resultado, el 66% dice que el número de aplicaciones y sus complejidades técnicas son una barrera para alcanzar la interoperabilidad. Las empresas que tienen éxito hacen de la alta interoperabilidad un elemento central de su estrategia global de negocio.
??Las compañías con una alta interoperabilidad no sólo se benefician de un mayor rendimiento financiero, sino que también son 12 puntos porcentuales mejores en la mejora de su cadena de suministro y operaciones; 16 puntos porcentuales mejores en la reinvención de la experiencia del cliente; 12 puntos más exitosos en la mejora de la productividad de los empleados y 4 puntos porcentuales más exitosas en la adopción de prácticas empresariales sostenibles.