La información no para de crecer y el reto está no sólo en gestionarla, sino en contar con la capacidad de ofrecer los datos más adecuados a quien los necesita, independientemente del dispositivo que se utilice. Se trata de una tarea que parece fácil de conseguir, pero que en realidad resulta muy compleja, y por ello las empresas están reformulando desde hace relativamente poco tiempo sus estrategias en torno a la inteligencia de negocio. En este proceso, nunca antes ha habido tanta necesidad de implicar a partes iguales al negocio con la tecnología, ya que, sin esa unidad, es imposible cumplir con las demandas de los usuarios, que son quienes finalmente tomarán las decisiones. Además, por estos motivos, cada vez se abordan más proyectos útiles para solventar problemáticas específicas frente a las grandes iniciativas globales de antaño.
Estas conclusiones se extraen de un almuerzo organizado por Computing y que contó con la participación de QlikTech Iberia y algunas importantes compañías del país, para debatir sobre el nuevo rol del Departamento TIC en la empresa y el impacto de la gestión de la información, junto con los proyectos que tienen en marcha en materia de BI y los retos a los que se tienen que enfrentar los CIO en su trabajo cotidiano.
