Según el séptimo informe World Quality Report (WQR) de Sogeti, Capgemini y HP, el proceso de transformación digital que están asumiendo las empresas ha disparado las inversiones en testing y soluciones para asegurar la calidad de las aplicaciones críticas de negocio. Concretamente, y según este informe, estas inversiones ya suponen el 35% de los presupuestos TI de las organizaciones, 9 puntos por encima del 26% que supusieron en 2014 y 12 puntos por encima del 23% de 2013.
Respecto a las prioridades que han determinado las inversiones en testing y calidad de las empresas, en primer lugar (80%), aparece la seguridad y muy cerca (un 78%), asegurar una buena experiencia de usuario, fruto del proceso de transformación digital antes mencionado y en el que la satisfacción del cliente, en un escenario de relación omnicanal, y con ciclos de vida las aplicaciones más cortos, se ha convertido en vital para las empresas.
Este esfuerzo por asegurar la satisfacción del cliente, queda demostrado en que la mayor partida presupuestaria en calidad y testing en los nuevos desarrollos se destina a soluciones de movilidad o canales de relación directa con clientes (35%), seguido, pero de lejos, por el entorno cloud, con un 18%, las soluciones de análisis del negocio (17%), aplicaciones legacy, un 16% y un 13% a soluciones ERP de back office.
Falta de eficacia y madurez en los modelos de testing
A pesar de este crecimiento de las inversiones en soluciones de calidad y testing, el informe de Sogeti alerta sobre el peligro de la falta de madurez y eficacia a la hora de abordarlo dentro de las organizaciones ya que, de ser así, las inversiones no deberían suponer más del 30% de los presupuestos de TI, y en 2015 este porcentaje fue del 35%. Además, las previsiones para 2018, apuntan a un 40%. Para Sogeti, este porcentaje es preocupante, más aún en el contexto actual de infraestructuras tecnológicas muy complejas.
Según el World Quality Report, de las tres partidas que componen cualquier solución QA (Quality Assurance) y testing: recursos humanos, herramientas y hardware e infraestructuras, es destacable que la que más crezca (un 4% respecto a 2014), sea la de hardware, hasta situarse en un 37%. Según el informe de Sogeti, es un cambio de tendencia que significa retroceder y tender hacia el 40% que supuso este gasto en 2013. Frente a ello, la inversión en recursos humanos ha descendido un 5%, hasta situarse en un 33% del gasto total, y las inversiones en herramientas también han decrecido hasta el 30% del gasto total.
Para José Luis Antón, Director de la Unidad de negocio de QA y Testing de Sogeti, “la inesperada inversión en hardware que refleja el informe, demuestra la ineficacia de los modelos de QA y testing adoptados por las empresas, teniendo en cuenta la disponibilidad de soluciones virtuales y en la nube que proponen los modelos eficientes para abordar estas prácticas y que no requieren invertir en nuevo hardware o infraestructuras”.