Check Point ha cumplido 25 años en España. El pequeño grupo de profesionales que empezó el negocio del fabricante israelí de software de seguridad a principios de los años 90 ahora se ha convertido en un equipo de casi 50 personas. En un reunión con periodistas para celebrar el cuarto de siglo de la filial, Mario García, su director general, dijo que la seguridad se ha convertido en una preocupación para todos en las empresas porque lo digital ha inundado todos los procesos y los ataques se han extendido. “En Israel hemos tenido la visita de empresas del Ibex35 interesadas en ver qué va a pasar en materia de seguridad”, reconocía García.
Por su parte, Eusebio Nieva, director técnico de Check Point, recordó que hoy la industria del cibercrimen factura en todo el mundo 1,5 billones de dólares, más que España en año y lo mismo que una economía como la rusa. Y recomendó a todos, empresas y particulares, poner todos los esfuerzos en la prevención para evitar problemas. Por su parte, Fernando Herrero, channel manager, confirmó que el mercado de la seguridad en España vive un momento dulce y que el crecimiento del mismo se acercará al 20%. Eso sí, advirtió que el sector se enfrenta a un problema de escasez de técnicos formados. “A la gente se la rifan ahora mismo en el mercado”, reconoció.
Lo digital ha inundado todos los procesos y los ataques se han extendido
Predicciones
Check Point predice un 2019 más peligroso, en el que los ciberdelincuentes van a seguir utilizando malware inteligente con capacidades de movimiento lateral. El ransomware ha sido en 2018 una fuente de dinero fácil para los delincuentes, así como un camuflaje para ocultar propósitos más destructivos. Usuarios de todo tipo -desde particulares hasta grandes empresas- han sido víctimas de un ciberataque. Se puede esperar ver grandes ataques orquestados en todo el mundo similares a WannaCry.
Los ataques de phishing dirigidos se volverán más frecuentes y una estrategia de ataque más popular. Asimismo, aumentarán los ataques a IoT, no solo como objetivos directos, sino también como el principal punto de entrada debido a que estos dispositivos, a menudo, son menos seguros que las redes, los endpoints o los centros de datos locales.
Con el creciente uso de los servicios de uso compartido de archivos en la nube, las fugas de datos seguirán siendo una gran preocupación para las organizaciones que se mueven en este entorno durante el próximo año. No obstante, espera que los cibercriminales se dirijan a departamentos y empleados específicos de la empresa, también conocidos como “spear phishing”, con el fin de conseguir recompensas más lucrativas, como por ejemplo el departamento financiero.